En el Discurso de Navidad del Papa Francisco, el pontífice pidió humildad a los miembros de la Curia, que forman el Gobierno de la Iglesia católica, y les animó a trabajar juntos y evitar que se creen “divisiones, facciones y enemigos”.
El Papa Francisco indicó que “los humildes y los preocupados no solamente por el pasado, sino también por el futuro, saben mirar hacia delante, extender sus ramas, recordar el pasado con gratitud”.
Al hablar de la humildad, el pontífice puso de ejemplo al Naaman el general enfermo de lepra que aparece en el Antiguo testamento.
El misterio de la #Navidad es el misterio de Dios que viene al mundo por el camino de la humildad.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) December 23, 2021
“Cada uno ha de tener la valentía de quitarse la propia armadura, de desprenderse de los ropajes del propio papel, del reconocimiento social, del brillo de la gloria de este mundo, y asumir su misma humildad”, indicó.
“Somos todos leprosos. Leprosos en espera de ser curados”, dijo el Papa a los prelados, a quienes recordó que “lo contrario de la humildad es la soberbia” y que “sin humildad no podemos encontrar a Dios ni experimentar la salvación”, y que “sin humildad no podemos encontrar al prójimo”.
Como parte de su mensaje anual de Navidad , el Papa Francisco recordó que “Jesús, que viene al mundo por el camino de la humildad, nos abre una vía, nos indica un modo, nos muestra una meta”.
A los miembros de la Curia el Papa Francisco les indicó tres palabras clave: participación, comunión y misión para un “estilo de humildad al que hay que aspirar”.
También les instó a “construir relaciones que vayan más allá del mero trabajo y fortalezcan los vínculos de bien ayudándonos mutuamente”.
Dejémonos evangelizar por la humildad de la #Navidad, del pesebre, de la pobreza y la esencialidad con la que el Hijo de Dios entró en el mundo. Dejémonos evangelizar por la humildad del Niño Jesús.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) December 23, 2021
Papa Francisco invita a la reflexión
El pontífice recordó que esta ocasión suele servir para dar un repaso de los males que aquejan a la jerarquía católica.
“Es también para cada uno de nosotros un momento de reflexión y de revisión, para que la luz del Verbo, que se hace carne, nos haga ver cada vez mejor quiénes somos y cuál es nuestra misión” , mencionó.
En casi nueve años de pontificado, el papa hizo a menudo de este encuentro anual una antología de reprimendas severas. En 2014, enumeró 15 “enfermedades” que aquejan a la Curia, que van del “Alzheimer espiritual” a la “fosilización mental”.
Con información de EFE