Hoy, 14 de abril, se conmemora el Día Mundial de la Enfermedad de Chagas, una fecha para concientizar sobre esta afección infecciosa causada por el parásito protozoario Trypanosoma Cruzi (T. cruzi).
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) Nombrada en honor a Carlos Chagas, el médico e investigador brasileño que la diagnosticó por primera vez en 1909, esta enfermedad representa un complejo problema de salud, especialmente en regiones tropicales desatendidas y poblaciones socialmente vulnerables. Un diagnóstico tardío o erróneo, sumado a un tratamiento y seguimiento inexistentes o incompletos, puede convertir esta infección en una amenaza letal.
Se estima que entre 6 y 7 millones de personas en todo el mundo están infectadas por T. cruzi, causando aproximadamente 12,000 muertes cada año. Aunque su presencia es cada vez más global, la enfermedad de Chagas se concentra principalmente en 21 países de América Latina, donde la transmisión está estrechamente ligada a la presencia de insectos vectores. Actualmente, se considera que unos 75 millones de personas están en riesgo de contraer la infección.
¿Qué es la Enfermedad de Chagas y Cómo se Contagia?
La enfermedad de Chagas, también conocida como tripanosomiasis americana, es una infección parasitaria sistémica y crónica. El principal mecanismo de transmisión en América Latina es a través de insectos triatominos, también conocidos como chinches besuconas, vinchucas, o chupadores. Estos insectos hematófagos se infectan al picar a animales o personas portadoras del parásito T. cruzi.
La transmisión a humanos ocurre cuando las heces infectadas del insecto entran en contacto con la piel lesionada, los ojos o la boca de la persona, generalmente al rascarse la picadura. Estos insectos suelen habitar en grietas de paredes y techos de viviendas precarias en zonas rurales y suburbanas, activándose por la noche para alimentarse de sangre.
Sin embargo, el parásito T. cruzi también puede transmitirse por otras vías, aunque menos comunes:
- Consumo de alimentos contaminados: Por contacto con heces u orina de triatominos o animales infectados.
- Vía congénita: De madre infectada a hijo durante el embarazo o el parto.
- Transfusiones de sangre o productos sanguíneos contaminados.
- Trasplante de órganos de un donante infectado.
- Accidentes de laboratorio.
Signos y Síntomas de la enfermedad de Chagas: Fase Aguda y Crónica
La enfermedad de Chagas se desarrolla en dos fases distintas:
- Fase Aguda de la enfermedad de Chagas: Dura aproximadamente dos meses después de la infección. Un gran número de parásitos circula en la sangre, pero los síntomas suelen ser ausentes o leves e inespecíficos, dificultando el diagnóstico. Estos pueden incluir fiebre, dolor de cabeza, inflamación de ganglios linfáticos, dolor muscular o articular, hinchazón en el sitio de la picadura (chagoma) o hinchazón de un párpado (signo de Romaña).
- Fase Crónica de la enfermedad de Chagas: Los parásitos se ocultan principalmente en los músculos cardiaco y digestivo. Hasta un tercio de los infectados desarrollan problemas cardiacos (miocardiopatía chagásica, arritmias) y aproximadamente uno de cada diez presenta alteraciones digestivas (megacolon, megaesófago), neurológicas o mixtas, generalmente décadas después de la infección inicial. La muerte súbita por complicaciones cardiacas es una de las consecuencias más graves.
Tratamiento y Control de la enfermedad de Chagas: La Importancia de la Detección Temprana
La enfermedad de Chagas puede tratarse con los medicamentos benznidazol o nifurtimox, los cuales son más efectivos para curar la infección si se administran en la fase aguda, incluyendo la transmisión congénita. Su eficacia disminuye en la fase crónica, y los efectos secundarios son más frecuentes en adultos mayores. El tratamiento también se recomienda en casos de reactivación de la infección y en la fase crónica temprana, especialmente en mujeres en edad fértil para prevenir la transmisión congénita, indicó la OMS.
La detección temprana es fundamental para un tratamiento exitoso y para prevenir complicaciones graves. Los profesionales de la salud de atención primaria juegan un papel clave en la detección, tratamiento, seguimiento y notificación de casos.
¿Cómo puedo prevenir la enfermedad del Chagas?
No existe una vacuna para prevenir la enfermedad de Chagas, por lo que la Organización Mundial de la Salud indicó que las estrategias de prevención y control se centran en:
- Control de vectores: Fumigación de viviendas con insecticidas residuales y mejora de las condiciones de las viviendas para evitar la infestación por triatominos.
- Medidas preventivas personales: Uso de mosquiteros y buenas prácticas de higiene alimentaria.
- Tamizaje de sangre donada y órganos para trasplante.
- Tamizaje de recién nacidos y otros hijos de madres infectadas.
- Educación y concientización de la población sobre la enfermedad y sus formas de transmisión.
Personas desconocen ser portadores del mal de chagas