El Servicio de Administración Tributaria (SAT) asegura que podrían fiscalizarte en caso de encontrar “discrepancias fiscales” en los traspasos entre tus cuentas, aquí te explicamos a detalle la situación.
Cabe recordar que mientras el traspaso se realice desde cuentas propias que tengan el mismo RFC o la misma persona moral, socio o persona física, no generarán impuestos.
¿Qué son las discrepancias fiscales?
El SAT detecta anomalías en las declaraciones cuando existen diferencias entre los ingresos que se han declarado y los depósitos que se perciben. De esta manera se generan ingresos extras que deberán pagar el impuesto establecido.
Es decir, las discrepancias fiscales son aquellas que se registran cuando el SAT descubre movimientos que muestran un incremento de patrimonio o fuente de riqueza.
Otro de los ejemplos que pone el SAT para descubrir si se incurre en una discrepancia fiscal es en caso de prestarle la cuenta a una tercera persona. En ocasiones se presentan situaciones en las que solicitan realizar el depósito a una cuenta, con la única finalidad de poder depositarlo.
En estos casos, el SAT podría solicitarle a la persona que compruebe que no se trató de un ingreso extra de actividades como una renta, una venta o cualquier otra cuestión que califique dentro del cobro de impuestos.
Para corroborar la situación basta un estado de cuenta, sin embargo, es importante estar al día con la información del RFC para facilitar la comprobación de los ingresos.
Cabe mencionar que el SAT cuenta con el poder de fiscalizar movimientos con hasta cinco años de antigüedad. De ahí la importancia de tener la documentación al día y, en caso de ser necesario, asesorarse con un especialista para asegurarse de estar día con las obligaciones fiscales del país.
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