La gastronomía mexicana posee gran cantidad de ingredientes, entre ellos las más de 26 mil especies de plantas comestibles que existen en el país, entre las que se encuentra el chipilín, utilizado tradicionalmente en el sureste de México. A continuación te explicamos qué es y para qué sirve.
¿De dónde proviene la palabra mexicana Chipilín?
De acuerdo con la Real Academia Española, la palabra mexicana Chipilín proviene del náhuatl “quilitl”, que significa “verdura tierna comestible”. Además puede significar “niño pequeño”.
Esta planta comestible, leguminosa y herbácea que tiene como nombre científico “crotalaria longirostrata”, la cual es utilizada en la cocina mexicana para los llamados tamalitos de chipilín típicos de Tabasco y otros platillos.
Está planta también se encuentra en algunas zonas de Centroamérica como Guatemala, donde sus hojas se utilizan en la preparación de diferentes recetas.
Platillos con chipilín en México
Esta planta está presente en diversos platillos de los estados al sur de México, tal como en Chiapas y Oaxaca donde se le agrega a las sopas y arroces, pero también es posible encontrarlo en otros platillos: espinazo de cerdo, caldo de camarón, sopa con bolitas de masa y tortillas.
Pero su forma más popular de consumo, son los tamales que te nombramos anteriormente, los tamales en Tabasco que envuelven en hojas de plátano.
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¿Qué beneficios aporta el chipilín?
Según el Instituto de Ecología (INECOL) las hojas de chipilín son ricas en minerales, calcio, potasio, magnesio, hierro, tiamina, riboflavina, niacina y ácido ascórbico.
Esto quiere decir, que su consumo puede ayudar en el mejor funcionamiento de las células del cuerpo, mejora de absorción de hierro en la sangre y puede aliviar la tensión muscular.
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